jueves, 10 de junio de 2010

Vamos México: breviario de un país que vive de la patada


Debido a que tenemos encima la fiebre futbolera, se impone la necesidad de romper el silencio, así sea por esta única ocasión (o dependiendo de si en el
inter no sucede algo de suma importancia).

1) Vivir de la patada. Que nadie se engañe con los spots bi-centenarios: el verdadero festejo (contradicciones nacionalistas) tendrá lugar en Sudáfrica, cuando se entone el himno nacional en el partido inaugural de la Copa del Mundo. Las conmemoraciones del 15, 16 de septiembre y 20 de noviembre, como auténtico colorario, no tendrán tanta audiencia compatriota como la de este 11 de junio vía satélite.

2) Spot. Uno de los anuncios a través de los medios masivos es ése que invita a ver las pantallas gigantes que se instalarán en las capitales de los 32 estados. Más de uno hemos pensado que son para ver a nuestros próceres nacionales en plena gesta heroica: el conejo Pérez, el payasito Ochoa, el chicharito Hernández, el venado Medina, el temo Blanco, etcétera.

3) Pronóstico reservado. Como Calderón estará en el estadio cuando los ratones verdes disputen su primer partido mundialista, y demostrada su calidad de ser un intimidante rey anti-Midas, apuesto a que ese partido se pierde (de todos modos, por decreto de FIFA, el árbitro se encargará de que así sea). Sin embargo no soy tan pesimista, y considero que ante Francia y Uruguay habrá mejor suerte: uno de esos cotejos se gana y el otro por lo menos se empata. Pero hasta ahí: a continuación explicaré porqué creo que en esta edición mundialista tampoco se llegará al quinto partido.

4) El nivel futbolístico. Los partidos de preparación fueron sumamente interesantes, pero sólo evidenciaron una cosa. Es cierto (a mí me tocó presenciarlo, por ejemplo, durante el Mundial de Argentina 78) que ante las grandes potencias antaño la portería mexicana terminaba llena de cuero (Rummenigge et al. alemanes se encargaron de eso en el estadio de la provincia de Rosario al son de 6 a cero), y ahora ya se tienen “mejores” resultados y hasta en ocasiones se domina el encuentro (recuerden el partido ante Argentina en Alemania 2006), pero el rival, con una mayor fortaleza mental, termina haciendo los goles: ¿no fue eso lo que pasó ante Inglaterra y Holanda?

5) Lo dicho. En cuanto a lo de Italia, es mero espejismo. En su oportunidad lo dije: la selección italiana se especializa en jugar a medio vapor la primera fase del Mundial (y conforme va avanzando la competencia va evidenciando su real nivel), por lo que para ellos un partido preparatorio equivale a una cascarita…

6) And the winner is. A mi parecer España, Inglaterra, Holanda y Brasil (Argentina tal vez, pero le falta entrenador) se perfilan como probables vencedores de esta contienda. Más seguro sería pronosticar como triunfador un factible equipo que se armara precisamente con los jugadores que no estarán presentes en Sudáfrica. Si se pudiera conjuntar una escuadra trasnacional compuesta por Peter Cech, René Adler, Michael Owen, Rio Ferdinand, David Beckham, John Obi Mikel, Mijail Ballack, Ronaldinho, Luis Anderson, José Bosingwa, Didier Drogba, Andrea Pirlo, Salvador Cabañas, Zlatan Ibrahimovic y Andrei Arshavin, ésa sería mi favorita. Como dice el dicho, no están todos los que son, pero esto además evidencia la forma en que los jugadores son exprimidos físicamente, debido a que muchas de estas ausencias son por lesiones de la carga de trabajo anual, y el espectáculo mismo resiente las consecuencias. Hace falta que alguien le haga entender eso a la FIFA, preocupada más en sus ganancias que en este tipo de problemas "menores"...

7) Nerviosismo. Lección del entrenador Javier Aguirre: ¿hay una mejor forma de tener intranquilo al portero de la selección para el partido inaugural que el mantenerlo a él y a los demás en la incertidumbre de quién será el titular para dicho encuentro?

8) Vamos México. Controversial ha sido el comercial donde aparece el entrenador Aguirre, pero ya que vivimos en el país de los malos entendidos (matan a jóvenes mexicanos lo mismo policías fronterizos gringos que militares nacionales, secuestran al jefe Diego, acusan a "probos" funcionarios del incendio en una guardería, muere una niña discapacitada, se escapa un personaje televisivo sospechoso de asesinar a su esposa y nadie sabe explicar por qué ni cómo sucedió todo esto), creo que lo que quiso decir, echándose porras a sí mismo (a como están las cosas creo que es lo único realmente sensato) es que debemos pasar “del México del sí se puede, al México del más trom-pudo”. Así sea...